Existe un tipo de alergia poco común pero igualmente fatídica para quien la padece justo ahora que se acerca el invierno: la alergia al frío, técnicamente conocida como urticaria por frío, y que en ocasiones podría estar relacionada con ciertos alimentos, y más en concreto con los clásicos que se consumen fríos.
De esta manera, no es díficil concluir que entre los desencadenantes más obvios de la alergia al frío destacan los alimentos fríos, tales como el helado, el sorbete o las bebidas heladas.
El caso es que la exposición a estos alimentos puede provocar una reacción inmediata, ya que la temperatura fría entra en contacto con la piel o las membranas mucosas.
La histamina es una sustancia química que el cuerpo libera en respuesta a las alergias, y algunos alimentos, como el pescado, los embutidos y los productos lácteos fermentados, contienen niveles significativos de esta histamina, de manera que consumir estos alimentos puede exacerbar los síntomas de la alergia al frío.
Además de los alimentos ricos en histamina, existen otros que pueden desencadenar la liberación de histamina en el cuerpo, lo que incluye frutas cítricas, tomates y chocolate, por lo que la ingestión de estos alimentos podría llegar a agravar los síntomas de la alergia al frío.
Además, algunos alimentos, como los picantes y el alcohol, tienen propiedades vasodilatadoras, lo que significa que pueden expandir los vasos sanguíneos y empeorar la urticaria por frío al aumentar la sensibilidad de la piel al frío.
De esta manera, si se tienen sospechas de que se padece alergia al frío o de que ciertos alimentos desencadenan estos síntomas, será fundamental buscar atención médica.
Los profesionales de la salud realizarán en estos casos pruebas de diagnóstico, tales como pruebas de parche frío, para confirmar la afección y ayudarte a identificar los desencadenantes específicos.
El manejo de la alergia al frío relacionada con alimentos implica evitar los alimentos identificados como desencadenantes, mantener la piel cubierta y abrigarse adecuadamente en climas fríos.
Como remedios, en algunos casos, los médicos pueden recetar antihistamínicos o epinefrina, sobre todo en los casos más graves de urticaria por frío.