El coronavirus no afecta por igual a todos los grupos de población, y aquellas personas con patologías previas que debiliten su sistema inmunológico o con enfermedades respiratorias tienen más probabilidades de sufrir complicaciones graves.
En este sentido, un artículo publicado en la revista Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism ha llegado a la conclusión de que “las personas que toman una clase de hormonas esteroides, las llamadas glucocorticoides, para afecciones como el asma, las alergias y la artritis de forma rutinaria pueden no ser capaces de generar una respuesta normal al estrés y tienen un alto riesgo si están infectadas con el virus que causa COVID-19".
Los glucocorticoides se utilizan para tratar una variedad de afecciones inflamatorias y administrados por muchas vías: pastillas, cremas e inhaladores. Las conclusiones del estudio apuntan a que los pacientes que toman estos medicamentos pueden ser más susceptibles al COVID-19 como resultado de la supresión del sistema inmunitario y, además, porque los fármacos suprimen su propia respuesta de esteroides a la infección.
De esta manera, las personas con insuficiencia suprarrenal primaria conocida, también conocida como enfermedad de Addison, y la insuficiencia suprarrenal secundaria, que estén llevando a cabo tratamientos de este tipo y que puedan estar infectados con el coronavirus también deberían tomar precauciones adicionales.
Los investigadores se han basado en la experiencia previa en pacientes con síndrome respiratorio aguda (SARS) y síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS), donde la terapia con glucocorticoides no tuvo beneficio alguno o se asoció con tasas más altas de ventilación invasiva y mortalidad. Por tanto, este tratamiento estaría contraindicado por la Organización Mundial de la Salud para los pacientes con coronavirus.
En el estudio se indica que para los pacientes con diabetes, la gravedad de la enfermedad por infecciones virales es notablemente mayor. Informes publicados en Wuhan revelaron que las personas con diabetes e hipertensión estaban sobrerrepresentadas entre los pacientes más gravemente enfermos de COVID-19 y también entre aquellos que sucumbían a la enfermedad.
En cuanto a los pacientes hipertensos, en otros estudios se ha sugerido que los receptores que encajan con el virus y lo ayudan a introducirse en las células humanas podrían aumentar la susceptibilidad y la gravedad a COVID-19 a través de la regulación positiva de ACE2, lo que explicaría la sobrerrepresentación de pacientes hipertensos en pacientes que mueren por el coronavirus.
En cualquier caso, conviene no alarmar en cuanto al uso de estos medicamentos, dado que en el caso de que los pacientes abandonaran el tratamiento, las consecuencias podrían ser mucho peores para su salud, según defiende la doctora en Farmacia Marián (Boticaria) García, que ha afirmado que “si los hipertensos o los asmáricos abandonan su medicación por el miedo a complicaciones por una enfermedad respiratoria que todavía no tienen, las consecuencias para ellos podrían ser nefastas”.
Los científicos ya han ayudado a descubrir cómo el virus responsable de COVID-19 entra en las células y se propaga de un individuo a otro, y algunos ya han hecho observaciones preliminares con respecto a las interacciones del virus con el sistema endocrino. En cualquier caso, los objetivos relacionados con la endocrinología están a la vanguardia de la ciencia del descubrimiento a medida que abordamos colectivamente esta pandemia.