La Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex (AEPNAA) ha organizado un campamento libre de alérgenos, que contará con la participación de 61 menores de entre 7 y 17 años que sufren hasta 58 alergias alimentarias diferentes.
El campamento, que se prolongó hasta el 4 de julio en la localidad valenciana de Alborache, coincidiendo con la Semana Mundial de la Alergia, incluyó una programación repleta de naturaleza, talleres, juegos y excursiones, todo ello en un entorno que cuenta con un "riguroso" protocolo sanitario y alimentario, lo que garantizó una convivencia segura y sin riesgos.
Uno de estos eventos consistió en montar un MasterChef AEPNAA, en el que los participantes pudieron cocinar por equipos recetas libres de alérgenos y pudieron demostrar sus dotes y talento culinario.
Según han señalado desde la organizacion, "esta actividad ha sido mucho más que un campamento: ha sido una oportunidad para que los menores con alergias hayan podido convivir entre iguales, aprender a cuidarse, ganar autonomía y disfrutar sin miedo. Para muchas familias, ha sido la primera vez que pueden separarse de sus hijos con tranquilidad".
Además de estar a tan solo 1,5 kilómetros de un centro de salud, a 5 de uno con Urgencias y a 30 kilómetros de un hospital, en el campamento también estuvieron presentes un médico, una enfermera, un estudiante de Medicina, dos cocineras formadas en gestión de alérgenos, cinco voluntarios y cuatro monitores.
Todos los participantes tuvieron que cumplir una serie de normas de higiene, entre las que se prohibieron los productos que contuvieron alguno de los 14 alérgenos de declaración obligatoria.
Las materias primas usadas en cocina fueron previamente revisadas y verificadas, hasta el punto de que todo el menú estuvo "cuidadosamente" planificado y elaborado en las instalaciones del Albergue Rural ACTIO, utilizando un menaje exclusivo para AEPNAA y bajo controles estrictos.
Las familias recibieron el menú antes del inicio del campamento para revisarlo y comunicar cualquier observación, y al mismo tiempo se incorporó la aplicación CampApp, que permitió a los pequeños mantener una comunicación diaria y directa con sus familias, reforzando la confianza en todo momento.
"Vivir con alergias alimentarias y/o al látex, supone muchas veces, perderse cumpleaños, excursiones, campamentos o simples meriendas con amigos (...) Por eso, este campamento ha querido representar algo muy valioso: un espacio donde los niños han podido ser simplemente eso -niños y niñas que juegan, aprenden, ríen y conviven- sin que su alergia lo condicione todo", ha explicado la madre de uno de los participantes.
El campamento contó con el patrocinio de la Plataforma Global para Pacientes de Alergias y Vías respiratorias (GAAPP), la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) y la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP).