Pésimas noticias para quienes padecen alergia primaveral: España se encuentra en la peor semana en muchos años para estos pacientes... y es que, en la mayor parte del país, se ha activado la alerta roja ante los elevados niveles de polen en el aire.
Según la plataforma Eltiempo.es, la presencia de los pólenes clásicos en primavera, como el de las gramíneas o el de los olivos, tendrá "valores muy altos" en esta última semana de mayo, alcanzando picos máximos los últimos días de la semana. Además, las altas temperaturas de los próximos días coinciden con un "episodio de calor extremo", lo cual podría agravar aún más los síntomas habituales de las personas con polinosis.
De esta manera, son pocas las provincias que no alcanzarán el nivel rojo en alguno de los dos días, y en concreto las provincias más afectadas son Lugo, Pontevedra, Ourense, León, Palencia, Valladolid, Zamora, Salamanca, Ávila, Segovia, Soria, La Rioja, Navarra, Madrid, Tarragona, Castellò, Badajoz, Cáceres, Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara, Toledo, Huelva, Sevilla, Cádiz, Córdoba, Málaga, Jaén y Granada; mientras que el resto de provincias, estarán en alerta naranja, y muchas cercana a la alerta roja.
La causa de esta situación es que tanto las gramíneas como los olivos están muy extendidos por todo el país. La familia de las gramíneas abarca diversos tipos de plantas como el arroz, la cebada, el centeno, el maíz, el trigo o el césped; mientras que por otro lado, el olivo, se puede hallar en amplias regiones de Andalucía, Castilla-La Mancha y el sur de la Comunidad de Madrid.
Los signos más habituales de polinosis son congestión nasal; rinorrea (aumento de mucosidad nasal); picor en la nariz, garganta y paladar; estornudos; tos seca; conjuntivitis (enrojecimiento de los ojos y lagrimeo) y dificultad o silbidos al respirar. El cuadro clínico puede ser leve y tener una corta duración, o complicarse y volverse más severo.
Abril y mayo han estado marcados por intensas lluvias, lo que ha provocado un crecimiento inusual de la vegetación en España, incluidas las gramíneas y los olivos... y la subida de las temperaturas a finales de mayo, combinada con las abundantes precipitaciones, ha provocado una explosiva ola de polinización que ha disparado los niveles en todo el territorio hasta niveles de record.