La germinación de algunas plantas y la llegada del frio y los primeros catarros provocan numerosos casos de conjuntivitis, una patología que afectar a alrededor del 30 % de la población, por lo que el Consejo General de Colegios Farmacéuticos ha lanzado una acción dirigida a promover la formación sobre esta materia entre los farmacéuticos y la educación sanitaria entre los ciudadanos.
Una ficha técnica para profesionales de la farmacia y una infografía con conceptos básicos para usuarios, son los materiales que se difundirán para sensibilizar y prevenir la aparición de esta patología.
En este sentido, María Isabel de Andrés, vocal nacional de Óptica y Acústica del Consejo General de Farmacéuticos, ha señalado que “la conjuntivitis es motivo de consulta habitual en las farmacias comunitarias todo el año, pero en la primavera y el otoño se incrementan los consejos relacionados tanto con conjuntivitis alérgica como infecciosa”.
Las conjuntivitis infecciosas aparecen con el frío y los primeros catarros, por lo que “los farmacéuticos vamos a insistir en consejos como el lavado de manos continuo, evitar tocarnos los ojos y lavarlos con suero para eliminar las secreciones, no compartir toallas o evitar ambientes con polvo y humo excesivo”, ha explicado de Andrés, quien ha advertido que cada caso debe ser valorado individualmente, ya que “desde la farmacia desarrollamos una labor fundamental de derivación al médico en los casos en que hay sospecha de posible conjuntivitis, por ejemplo, si el paciente presenta dolor o visión borrosa o si los síntomas no desaparecen en cuatro días”.
La conjuntivitis es una inflamación y/o enrojecimiento de la membrana mucosa que recubre los párpados y la parte anterior del ojo, generalmente causada por virus, bacterias o por una alergia. Entre sus síntomas destacan lagrimeo, fotofobia, ojo rojo, edema, picor, secreciones (legañas) y/o sensación de cuerpo extraño.
En caso de aparecer los síntomas, los farmacéuticos aconsejan realizar una buena higiene ocular y de párpados (con baños y toallitas oculares), usar gotas humectantes sin conservantes (para paliar los síntomas) y no automedicarse en ningún caso.
Los usuarios de lentillas deben dejar de usarlas y al finalizar el proceso de la infección utilizar unas nuevas, en caso de que sean desechables, o limpiarlas en profundidad antes de su reutilización, en caso de que sean anuales.
E cualquier caso será el médico quien diagnostique una posible conjuntivitis, por lo que desde la farmacia se insiste en no utilizar nunca antibióticos si no es por prescripción facultativa.
