El servicio de Alergología del Hospital Universitario de Guadalajara, ha publicado un estudio en la prestigiosa revista médica especializada Biomedical Journal of Scientific & Technical Research, basado en la posibilidad de detectar las reacciones alérgicas a medicamentos antes que aparezcan los primeros síntomas.
El equipo de Alergología del hospital, encabezado por la jefa del citado servicio, Arantza Vega, ha llevado a cabo este estudio junto con la ingeniera de telecomunicaciones Raquel Gutiérrez Rivas, del departamento de Electrónica de la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Alcalá, que han contado con la colaboración de la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Cork (Irlanda).
El trabajo se ha desarrollado durante dos años con la participación de 135 pacientes con antecedentes de reacción alérgica a medicamentos a los que se sometió a una provocación controlada y monitorizada. El objetivo era analizar la utilidad de un sistema electrónico que implementa un algoritmo diagnóstico para el análisis automático de la frecuencia cardiaca.
Mediante la monitorización de la frecuencia cardiaca del paciente y con ayuda de un algoritmo matemático desarrollado por Raquel Gutiérrez Rivas, se pudo analizar la variación de dicha frecuencia y valorar alteraciones que permitieron predecir, en un alto porcentaje de los pacientes analizados, la reacción alérgica antes de la aparición de sintomatología.
La conclusión del estudio es que el uso de un sistema de monitorización electrónica de la frecuencia cardiaca resulta útil para diagnosticar la hipersensibilidad a medicamentos y permite detectar la reacción alérgica al menos 90 minutos antes de la aparición de síntomas físicos, lo que se traduce en una mayor seguridad para el paciente.
Para la realización del estudio se ha tenido en cuenta la edad, género, la frecuencia cardiaca o la tensión arterial de los participantes, entre otros aspectos.
Los fármacos pueden provocar reacciones de hipersensibilidad, dependiendo del tipo de medicamento,y la vía de exposición y los síntomas, que pueden ir desde una simple manifestación cutánea a cuadros más graves como la anafilaxia.
La desensibilización a fármacos se basa en la introducción de dosis crecientes del medicamento que causa alergia, siempre en un entorno hospitalario y en condiciones controladas. Se hace en distintos pasos hasta alcanzar la denominada dosis terapéutica. De esta manera se logra que los pacientes puedan seguir recibiendo tratamientos que son indispensables para su salud, como ocurre con los pacientes oncológicos, evitando fallecimientos, además de mejorar notablemente la calidad de vida de las personas que sufren alergia e intolerancia.
