Según ocurre con las personas, los perros también pueden tener alergias, y como pasa en el caso de los humanos, para determinarlas es necesario realizar un test de alergia.
La alergia en perros es una afección muy común y uno de los principales motivos de consulta a los veterinarios, hasta el punto de que los canes pueden sufrir una gran cantidad de alergias. Por ese motivo, es fundamental determinar la causa para imponer el tratamiento más efectivo y evitar los elementos que desencadenan la crisis.
Para conocer qué tipo de alergia afecta a los perros, es necesario hacer pruebas de alergia. Es importante recordar que los canes no muestran signos tan evidentes de alergia como las personas; de ahí la importancia de prestar atención hasta a los más mínimos cambios físicos y de comportamiento.
En general, muchos canes presentan alergias a determinados tipos de alimentos. Los síntomas más comunes son: irritación de la piel, vómitos, diarrea, urticaria... etc., pero los perros también pueden tener reacciones alérgicas a componentes del medio ambiente como polen, moho o polvo. De igual forma, también les puede afectar la picadura de algunos insectos
El análisis sanguíneo es una de las pruebas más efectivas y sencillas para determinar o en su defecto descartar gran parte de componentes alérgenos. Para ello se utilizan paneles completos de compuestos ambientales o de diferentes alimentos.
La exclusión alimentaria es un método sencillo y económico que consiste en eliminar de la dieta del perro uno o varios alimentos hasta dar con aquel que esté desencadenando la alergia. En cuanto a los alimentos, los que más suelen generar alergia son los cereales de trigo y de arroz, así como también algunos tipos de carnes.
Por otra parte están las inyecciones intradérmicas, que constituyen una de las opciones más fiables para determinar qué le está generando alergia al animal. Esta prueba es un poco más costosa y requiere rasurar al perro para inyectarle el alérgeno en la piel para observar la reacción.
