Cuando la nariz moquea y los estarnudos no cesan, lo más tradicional es recurrir al Benadryl, un medicamento cuyo nombre genérico es difenhidramina, que proporciona un alivio casi inmediato de la alergia. Pero como este fármaco existe desde la década de 1940, ahora se ha convertido en el “Kleenex” de los antihistamínicos.
De estas manera, los expertos creen que ha llegado el momento de decirles adiós a unos fármacos demasiado anticuados, debido a la forma en que los antihistamínicos más antiguos, como el Benadryl, atraviesan la barrera hematoencefálica, provocando somnolencia y aumentando el riesgo de caídas, accidentes de coche y, provocando potencialmente, incluso demencia.
Resulta que en la actualidad existen opciones mejores y más seguras.
Nuestro cuerpo produce la sustancia química histamina para movilizar el sistema inmunitario contra los gérmenes, pero esta alarma puede ser activada también por las flores primaverales, los cacahuetes y otras amenazas. Los antihistamínicos bloquean esta falsa alarma y así ayudan a prevenir o aliviar los síntomas de la alergia.
El caso es que el Benadryl, el Zzzquil y otros fármacos con difenhidramina pueden producir somnolencia, ya que la histamina ayuda al cerebro a mantenerse alerta.
Según ha explicado Zachary Rubin, alergólogo de Illinois y autor del libro de próxima aparición All About Allergies, "esto se produce a costa del sueño y de movimientos oculares rápidos (MOR), que son importantes para la consolidación de la memoria y la función cerebral en general". De esta manera, la sensación es más parecida a la de estar noqueado después de haber bebido demasiado, que a la de un sueño profundo y reparado.
Según ha detallado dijo David Stukus, director del Centro de Tratamiento de Alergias Alimentarias del Hospital Infantil Nationwide, “tienes este efecto de resaca persistente, así como dificultades para prestar atención, recordar cosas con claridad o incluso mantenerse despierta".
Así las cosas, el Benadryl se ha asociado a un peor rendimiento escolar y, en un pequeño estudio, mermó la capacidad de las personas para conducir más que el alcohol.
La Unión Europea ha incluido este fármaco en su lista de “no conducir”, y los pilotos no pueden volar si lo han tomado en los últimos dos o tres días. Además de bloquear la señal de la histamina, el Benadryl interfiere con la sustancia química cerebral acetilcolina, responsable de la atención, la concentración y la memoria, ha explicado Malaz Boustani, geriatra y neurocientífico de la Universidad de Indiana.
Cada vez son más las investigaciones que relacionan el consumo habitual de estos fármacos con un mayor riesgo de demencia. En un estudio de 2015 publicado en la revista JAMA Internal Medicine, los investigadores hicieron un seguimiento de más de 3000 adultos mayores sin demencia durante siete años y descubrieron que el uso frecuente a largo plazo de fármacos bloqueadores de la acetilcolina se asociaba a un riesgo un 54 % mayor de demencia y un 63 % mayor de enfermedad de Alzheimer.
Los expertos afirman que estos resultados no prueban que el Benadryl específicamente cause demencia, y no está claro si el riesgo se extiende a personas más jóvenes o incluso al uso a corto plazo; pero dado el creciente número de pruebas que relacionan los antihistamínicos más antiguos con el deterioro cognitivo, Boustani ha explicado que ya no receta Benadryl.
La difenhidramina también se encuentra en más de 300 productos distintos, incluidos algunos productos de las marcas NyQuil y Tylenol, por lo que Boustani recomienda a los pacientes que lean las etiquetas de sus medicamentos favoritos para la alergia, el sueño o el resfriado, y que pregunten a un farmacéutico si no están seguros.
Aunque Zyrtec ofrece un alivio de acción rápida y Allegra tiene menos efectos secundarios, ambos son más duraderos que el Benadryl. Aunque no te noquearán tan rápidamente, los expertos dicen que son más seguros que el Benadryl, pero si notas que estás utilizando cualquier antihistamínico más de dos o tres veces por semana, vale la pena consultarlo con el médico, ha explicado Rita Kachru, jefa de alergia e inmunología clínica de UCLA Health.
En última instancia, los expertos dicen que hay pocas razones para tomar Benadryl durante más de un par de días. En este sentido, Stukus ha explicado que “puedes elegir conducir un Impala de 1976, o puedes elegir conducir un automóvil más moderno”, para añadir que “sólo porque siempre hayas hecho algo de cierta manera, no significa que sea la mejor opción disponible”.