Estar al pendiente de tu cuerpo al comer algún alimento puede evitar una preocupante alergia alimentaria que podría afectar de forma significativa a casi cualquiera. En ocasiones las personas suelen confundir una alergia con la intolerancia a la comida, pero hay factores que la pueden hacer mucho más grave de lo que en realidad es.

Entre la lista de alimentos más comunes que generan alergia alimentaria están los huevos, leche, gluten, soja, cacahuates, pescado y camarones... pero también en los vegetales hay una lista importante, pues se encuentran las aceitunas, los hongos, tomate, berenjena, espinaca y los pepinillos.

Para evitarlo, los especialistas sugieren una serie de puntos que ayudarán a diferenciar y cuidar la alimentación:

- Sientes picazón en la garganta y la boca. Los estudios médicos aseguran que este punto es uno de los más preocupantes, pues puede causar tantas reacciones como el asma. La presencia de estos síntomas se debe a una respuesta del sistema inmune ante algunas proteínas.

- Salen ronchas después de consumir ciertos alimentos. Según la doctora Claire Morrison, presentar ronchas o sarpullidos, es uno de los signos más evidentes de alergia, por lo que recomienda hacerse una prueba para saber qué grupo de alimentos causan esa reacción.

- Fuertes estornudos o respiración entrecortada. Si este fenómenos se presenta durante la ingesta de ciertos alimentos, será mejor hablar con un doctor pues son los primeros síntomas de una anafilaxis o una alergia severa que puede poner en peligro la vida.

- Dolor al tragar. “Los síntomas menos obvios incluyen dificultad para masticas, dolor al tragar o la sensación de que la comida se queda pegada”, ha afirmado el doctor Omid Mehdizadeh, otorrinolaringólogo del Saint John Health Center.

- Un pequeño mordisco para empezar a notar cambios. Si en el primer bocado notas cómo se presenta un dolor en la boca o en las vías aéreas, esto puede ir más allá de una simple intolerancia a los alimentos.