Con la llegada de la primavera vuelven las mediciones de polen y los especialistas vuelven a aportar sus consejos para evitar los tradicionales síntomas de las alergias, tales como estornudar a todas las horas, el enrojecimiento de los ojos, o el picor extremo de nariz y ojos.
Aunquees para los alérgicos para quienes empieza la peor época del año debido la subida de las temperaturas y la floración, hay alergias que se mantienen durante todo el año, siendo en muchas ocasiones evitables, aunque en otras muchas no. Es el caso de la alegia al polvo, una de las más comunes y que es especialmente molesta, porque da la sensación de que lo quitas para aparecer a los pocos segundos comopor arte de magia.
Así las cosas, el polvo se va posando poco a poco en los lugares más impensables de nuestro hogar y puede ocasionar importantes problemas a las personas alérgicas a él... y aunque hay que sewr realistas y reconocer que jamás se va a poder eliminar al 100 % del hogar, en el caso de los alérgicos, los expertos apuntan algunos consejos que pueden ser definitivos. Estos son:
- Evitar algunos imanes para el polvo
Las alfombras, sobre todo las de pelo largo, son grandes enemigas de los alérgicos, ya que el polvo se pegará a ellas y si no se usa un aspirador de calidad, jamás desaparecerá del todo el polvo. Además, deben ser limpiadas cada poco tiempo. En cualquier caso, si se utilizan alfombras, que sean mejor de pelo corto o sintéticas.
- Optar por una decoración fácil de limpiar
Aquí entran en juego, aparte de las mencionadas alfombras, las cortinas, las persianas e incluso los manteles de las mesas, que deben ser fáciles de limpiar y de colocar, ya que habrá que hacerlo cada cierto tiempo. Y si sus materiales son sintéticos o plásticos, mucho mejor.
- Tener cuidado con los tapizados
La madera, el cuero, el plástico o el metal son más fáciles de limpiar que los muebles tapizados, ya que en estos materiales el polvo desaparecerá tras pasar un simple plumero o atrapapolvo.
- Evitar los adornos
Si la idea es ayudar a la limpieza y eliminar el polvo, toda decoración muy sobrecargada será más difícil de limpiar, por lo que si se es alérgico al polvo, mejor optar por lo justo y necesario.
- Limpiar con asiduidad
Es el mejor consejo, ya que muchos de los anteriores consejos están destinados a facilitar este trabajo. Si lo vas quitando, aunque solo sea en las zonas que más se usan, se notará enseguida.