La mayoría de niños alérgicos a frutos secos lo seguirá siendo en la edad adulta

La mayoría de niños alérgicos a frutos secos lo seguirá siendo en la edad adulta

La mayoría de niños con alergia a frutos secos la seguirá padeciendo en su edad adulta, según los expertos participates en el XLV Congreso de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP), en el que también se ha concluido que solo un 10 % de los niños con alergia a frutos secos consigue superarla de forma espontánea.

 

El caso es que, en la mayoría de los casos esta alergia persiste en la edad adulta, pero los avances conseguidos en la inmunoterapia a alimentos podrían mejorar el futuro de estos niños y conseguir que estas cifras sean mayores, lo que tendría un notable impacto en su calidad de vida. 

Los frutos secos son la segunda causa de alergia a alimentos de origen vegetal tanto en la infancia como en la edad adulta, y la principal causa de mortalidad por anafilaxia durante la adolescencia.

En España, la principal responsable es la nuez, seguida de la avellana, la almendra y el cacahuete; y un estudio español ha constatado que la incidencia acumulada de alergia a estos alimentos en los tres primeros años de vida era del 0,83%, aunque algunas estadísticas la sitúan hasta en el dos por ciento.

Según el miembro del Grupo de Trabajo de Alergia Alimentaria, Carlos García Magán, "el principal tratamiento para estos casos es la evitación total del alimento en la dieta. En el caso de los frutos secos la opción clásica era evitar todos los frutos secos, incluyendo aquellos que el niño toleraba, ya que era una medida más fácil de cumplir y con menor riesgo de ingestas accidentales".

Las dietas restrictivas en las que se eliminan todos los frutos secos disminuyen la calidad de vida de estos niños y suponen un riesgo mayor de desarrollar una alergia alimentaria a otro fruto seco que previamente no padecía. En este sentido, el doctor García Magán ha recalcado que "además, puede acarrear déficits nutricionales en aquellos menores que tengan alergias alimentarias múltiples".

La alternativa sería eliminar solo el fruto seco que ha demostrado causar alergia, con lo que, según el experto, "se mejora su calidad de vida, ciertos factores sociales, y conseguiríamos un potencial freno al desarrollo de alergia a otros frutos secos".

Sin embargo, puede ser más difícil de cumplir y dar lugar a confusión, errores e ingestas accidentales, a juzgar por el hecho de que en los últimos años, distintos trabajos y ensayos clínicos han apostado por la inducción a la tolerancia oral a frutos secos. Así las cosas, el doctor García Magán ha subrayado que "hasta el momento, los trabajos se habían centrado en la ITO a cacahuete por su relevancia en los países anglosajones, consiguiendo muy buenos resultados con un alcance de la tolerancia a este alimento en más del 60 por ciento de los casos. Por otra parte, algunos autores abogan por el uso de la ITO a frutos secos, para conseguir una desensibilización a uno o varios frutos secos simultáneamente. Esperamos que en los próximos años salgan cada vez más datos que apoyen la ITO a frutos secos como una práctica habitual, efectiva y segura, tal y como se ha conseguido hasta ahora con la leche y el huevo".

En esta linea, un trabajo reciente publicado en la revista especializada The World Allergy Organization Journal ha destacado el papel de la inmunoterapia oral como estrategia alternativa a las dietas de evitación en el caso de la alergia a la nuez y otros frutos secos; al tiempo que se ha investigado la inmunoterapia sublingual y epicutánea en cacahuete, y algunos autores defienden el uso de omalizumab, un medicamento biológico basado en anticuerpos monoclonales, para la desensibilización a alimentos.

Según ha enfatizado García Magán, "hasta ahora se ha probado con leche, huevo y cacahuete y ha demostrado disminuir el riesgo de reacción grave. No obstante, el hecho de que sea un uso fuera de indicación por ficha técnica y que el coste-beneficio para el manejo de la alergia alimentaria no haya sido claramente establecido, hace que a día de hoy no se pueda recomendar su uso generalizado para este propósito".

En cualquiera de estos casos, los pediatras alergólogos insisten en la importancia de que el tratamiento se haga individualizado y tras un completo estudio alergológico, teniendo en cuenta que el 80 % de las unidades de alergia pediátrica considera que la atención de los pacientes con alergia alimentaria se ha visto mermada durante la pandemia.

Es uno de los resultados de una encuesta desarrollada por el Grupo de Trabajo de Alergia Alimentaria de SEICAP en la que han participado 32 unidades de toda España para evaluar el impacto en el trabajo previo a la pandemia y durante la misma en 2 períodos, marzo-abril de 2020 y septiembre-octubre de 2020.

En este sentido, destacan las dificultades que encontraron los profesionales para avanzar en el manejo del niño con alergia a múltiples alimentos durante la pandemia y el rechazo de muchas familias a una cita presencial; y se ha supuesto un retraso y un incremento de las listas de espera para aquellos que estaban esperando iniciar un tratamiento de inducción a la tolerancia oral.