Tener asma ya no supone contar con más riesgo a la hora de sufrir un covid grave, de manera que los asmáticos pueden suspirar aliviados porque la infección pandémica no hace más mella en ellos, que, en la población sana, a pesar de su patología añadida.
En cualquier caso, deben extremar las precauciones, de la misma manera que sucede con la gripe, según ha explicado al diario El Mundo Marina Blanco, coordinadora del Área de Asma de la Sociedad española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
Un estudio publicado en la revista Annals of the American Thoracic Society, pone en cuestión que este grupo de pacientes siga siendo considerado como de riesgo, ya que los investigadores del mismo sientan las bases para descartarlos.
El trabajo dirigido por Fernando Holguin, profesor del Programa de Investigación y Clínica del Asma de la Universidad de Colorado, pretendía dar respuesta a la duda con la que titulaba su investigación: «El asma en las hospitalizaciones por COVID-19: ¿un factor de riesgo sobrestimado?». Para ello, compararon la prevalencia de la patología respiratoria entre los pacientes hospitalizados por Covid-19, y se recogió en 15 estudios revisados, con el de la prevalencia de asma de la población correspondiente.
Los datos de la investigación representan una buena noticia para los asmáticos, ya que al contrario de lo que de pensaba al principio de la pandemia, estos pacientes crónicos no precisan más cuidados que los que ya manejan.
Además, estos pacientes ya se cuidaban mucho desde el principio de la pandemia, y ahora no deben dejar de hacerlo y seguir con la constancia en sus tratamientos, pero ya no tienen peligro de padecer un covid severo
Holguin ha explicado que «usando datos de nuestro hospital, también observamos que entre los pacientes con covid, aquellos con asma, que tenían una tasa de prevalencia del 12%, no parecían tener más probabilidades de estar intubados que los no asmáticos».
El equipo de Holguin establece la teoría de que los inhaladores de corticosteroides que usan muchas personas con asma dificultan la entrada de coronavirus en sus vías respiratorias. Específicamente, estos individuos pueden tener niveles más bajos de expresión de ACE2, una proteína que se une al SARS-CoV-2. Las personas con asma asociado a alergias también pueden tener una menor expresión de ACE2, usen corticosteroides o no.
El beneficio de los efectos de los inhaladores precisa de más investigación, y según explica la portavoz de Separ, «aún estamos estudiando bien qué ocurre y vinculando los porqués, pero los corticoides han demostrados un aspecto protector usados de forma sistémica. Hay nuevos trabajos que así lo apuntan»
Parece que además, el uso de los corticoides administrados en los inhaladores en este tipo de pacientes les confiere una suerte de escudo. «El uso de éstos impide que el virus se adhiera a determinadas zonas de las células que normalmente infecta a lo largo de las vías aéreas», han puntualizado los investigadores.
En cualquier caso, no se trata de emplear estos inhaladores como prevención frente al virus SARS-CoV-2, sino de que los pacientes han de tomarlos lo hagan de la forma prescrita y continuada, ya que cuesta que sean cumplidores a la hora de seguir las pautas terapéuticas.
